La automatización y el control industrial son aliados imprescindibles para incrementar la productividad y eficiencia en tu negocio.
Vivimos en un mundo totalmente digitalizado en el que los mercados se han vuelto cada vez más competitivos y estrechos con la llegada de protagonistas de distintas latitudes, ante este panorama, las empresas se ven obligadas a redoblar sus esfuerzos para mejorar la calidad de sus productos y procesos, no sólo para sobresalir en su nicho, sino también para ser más eficientes y generar mayores utilidades.
Esta misión es posible sólo con la automatización y control industrial, ya que estos sistemas se enfocan en reducir la injerencia humana en los distintos procesos relacionados tanto en la operación como administración de una planta, minimizando, así, las posibilidades de cometer errores o sufrir accidentes.
¿Qué es la automatización industrial?
Cuando hablamos de este concepto nos referimos al conjunto de herramientas tanto digitales como mecánicas que se usan, mediante técnicas y métodos específicos para optimizar el funcionamiento integral de una fábrica, ensambladora o procesadora.
Para que una planta industrial eficientemente se requiere la aplicación de diferentes tipos de instrumentos y conocimientos, por un lado está la mecánica- eléctrica, por el otro está la ingeniería en sistemas computacionales y lo que conjunta a ambas es la mecatrónica, aquella disciplina que hace posible configurar la actividad de las máquinas desde un software, todo este conjunto de dispositivos y capacidades integran un sistema de automatización y control industrial.
De tal forma, la posibilidad de regular, gestionar, monitorear y evaluar los procesos operativos y administrativos que suceden en tu planta industrial, es el resultado de la aplicación correcta de esta tecnología.
¿Qué son los sistemas de control de automatización industrial?
Se trata de aplicaciones que permiten gestionar las máquinas utilizadas en los procesos industriales con la finalidad de configurar meticulosamente su desempeño para, así, garantizar el control de calidad, tanto de métodos, como de los productos.
El uso de estos sistemas computacionales aplicados en sector industrial representan varios beneficios para la operación de una planta:
- Estandarización. Con esta tecnología es posible regular cada una de las acciones que ejecuta una máquina, como la cantidad de material que vierte para la fabricación de una pieza, la temperatura requerida en un horno, la velocidad de revoluciones que necesita en una centrifugadora, etc.
- Productividad. El uso de estos sistemas permite verificar el seguimiento de métodos, de manera que es posible sincronizar el trabajo de la maquinaria según sea requerido, lo que es importante para aumentar la productividad diaria de la planta industrial, ya que reduce los tiempos muertos.
- Calidad. Otro de los beneficios es el impacto que tiene esta tecnología sobre el cumplimiento de las características específicas requeridas para cada pieza o proceso determinado, es decir, estos sistemas facilitan la supervisión del cumplimiento de los estándares previamente establecidos para cada producto o tarea.
Se trata, entonces, de la tecnología que ha provocado una nueva revolución industrial, digitalizando todos los procesos industriales para garantizar la mayor eficiencia en la producción, lo cual se traduce en un crecimiento de la capacidad de la planta, generando a la postre mayores utilidades.
Herramientas de Control industrial
Muchas son las herramientas digitales que pueden ayudarte a optimizar la automatización y control industrial de tu negocio, sin embargo se engloban en algunas categorías bien definidas, según su función y objetivo.
• Interfaz Hombre Máquina
Mejor conocido como HMI, por sus siglas en inglés, este sistema crea una ruta para interactuar con el equipo y regular todas sus funciones para que la programación y la automatización sean amigables y efectivas. La finalidad de esta implementación es que cualquier trabajador pueda controlar todos los aspectos de la máquina sin la necesidad de un programador.
• Controlador lógico programable
También llamado PLC, es el dispositivo que da sentido a la interacción creada por el HMI dentro de un aparato, es decir, interpreta la información que ingresa el trabajador y la convierte en impulsos eléctricos, algoritmos de programación e instrucciones internas que controlarán cada acción de la máquina, como si se tratara de un cerebro artificial.
• Sistema de visión industrial
Se trata de uno de los implementos tecnológicos más complejos en cuanto a su composición, pues desempeña las funciones de los ojos de la máquina. Utiliza herramientas digitales y mecatrónicas para fungir como un infalible supervisor de las tareas realizadas. Este sistema se vale de sensores, cámaras y lectores ópticos para interpretar el cumplimiento de los estándares de calidad en cada producto, es decir, compara imágenes de piezas perfectas con las que está fabricando para determinar si cumple con las características necesarias.
Todas estas herramientas, en conjunto, hacen posible un control absoluto sobre la producción en la planta industrial, ya que permiten que el vínculo entre operador y máquina sea cada vez más intuitivo y automatizado.
La automatización y el control industrial, si bien no son sinónimos, si son desarrollos aliados, que resultan imprescindibles para aumentar la productividad en la empresa. Se trata de una tecnología que lleva la producción al máximo nivel de digitalización, mismo que permite ahorrar costos operativos, reducir pérdidas, aumentar la calidad de los productos y, en suma, elevar las utilidades y la rentabilidad de tu negocio.
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